Y bueno Andrés Manuel López Obrador fiel a su demencial estilo ya estableció lo que seria una definición oficial a todo aquel «incidente» o agresión, atentado, acción, reacción o ataque de los integrantes del crimen organizado y la calificación se establece, cuando ya es atacada la población civil (lo que no es nuevo).
Y la justificación de la no aceptación, de que ya estos hechos se pueden calificar como actos terroristas, la negación es simple, culpar al pasado, al amarillismo de los medios y hablar de actos de propaganda en contra de su gobierno.
Para él todo es en su contra y se exagera en la difusión de hechos criminales, desaparición de ciudadanos, feminicidios, mal manejo de la pandemia, escasez de medicamentos, inflación o altos costos en la gasolina, estrategia de seguridad fallida, corrupción a todo nivel, tanto de familiares cercanos, como de funcionarios e incluido el propio ejército, corrompe a ciudadanos por medio de las tarjetas del Bienestar, todo es culpa de los conservadores, los medios y hasta de la clase media aspiracional, todos los opositores complotan en contra de su persona y proyecto.
Fija postura y da línea en las mañaneras y hace balar como borregos a todos sus funcionarios, pone en acción a las redes sociales a repetir sus consignas y mentiras para tratar de hacerlas «su verdad», asi tenemos que la propaganda oficial pasa a ser parte del dispendio económico de su gobierno, esto sin contar el sobre precio de sus tres obras faraónicas ejemplos de fracaso y corrupción, para lo cual usa la muletilla de la seguridad nacional, asi rubrica la opacidad.
Lo sucedido en Jalisco, Guanajuato, Chihuahua y Baja California tiene el tufo de la duda, hablan de que estos enfrentamientos, son meras «protestas», o ¿a acaso son inducidos y orquestados desde los pasillos de Palacio Nacional?, ¡caray!, calificar a quien así trata de minimizar estos hechos, sólo tiene una sola definición y esa es que este orate, es simplemente un demente cuya locura, pone a los mexicanos como carne de cañón a merced de cualquier criminal, ya sea del crimen organizado o de cualquier imitador que aproveche la pasividad de la reacción y la impunidad de la comisión.
Es lamentable ver el deterioro mental de quien se siente mesías y pasa a ser una caricatura de aquello que tanto ofertó, seguiremos escuchando «su versión y definición» de las cosas, veremos a sus funcionarios sin dignidad, aplaudir y difundir sus dichos, sus hechos y ocurrencias, de entrada habrá que ver los que pasa en lo relativo, al narco, a la criminalidad y al terrorismo en contra de México y los mexicanos, como pasa a ser una mera propaganda del… Narco Marketing
PD. Hay que recordar que AMLO ha calificado de traidores a sus opositores, cuando tanto en el ejército, como en su gabinete los TRAIDORES a México están bien definidos, creando una nueva Oligarquía basada en la corrupción y la omisión, una complicidad por comisión.
Miguel Ángel Hernández Albarrán