¿Acto de dignidad?
El sábado 8 de junio se llevó a cabo dicho evento, y el presidente fue recibido entre gritos y porras por algunas decenas de ciudadanos en Tijuana. Obrador insistió en el acuerdo sobre las medidas anunciadas por Trump, que por el momento, no se llevarán a cabo y reiteró que su administración busca mantener «una relación de amistad con el gobierno y el pueblo de Estados Unidos».
Ahí, el Canciller de México, Marcelo Ebrard Casaubón, destacó que México no ganó todo, pero que sí salió “con la dignidad intacta”. En un momento de “franqueza” el funcionario mexicano sostuvo: “No ganamos todo, pero sí ganamos que no tengamos tarifas”.
“No hay tarifas, Presidente y salimos con la dignidad intacta”, dijo Ebrard, sobre cómo le dio el reporte del trabajo de la delegación mexicana en Washington a López Obrador.
Detalló que el problema “con las famosas tarifas” es que como efecto de esos aranceles (primero del 5 por ciento) habría una importante caída en la inversión, habría una importante caída en el número de empleos, estimamos que más de 900 mil personas se podrían haber quedado sin trabajo”.
Vendría un aumento de precios, “y lo más grave”, que las tarifas podrían haber hecho inviable un tratado de libre comercio con EU.
Al final del día, no “ganamos” todos los puntos que México planteó, sí, lograron cosas, el lunes no va a haber tarifas, pero ¿qué perdimos en ese sinuoso camino?
Y una cosa es clara: debemos estar vigilando y estar muy aplicados en la relación México-EU. Durante los próximos meses se tendrá que trabajar muy fuerte para mantener la relación.
México ofreció que las personas migrantes que pasen por territorio nacional tengan que registrarse; el Gobierno de México, con el apoyo del Congreso, se dispuso que se instituyera la Guardia Nacional.
Estados Unidos decidió devolver a 8 mil personas a México para que esperen aquí la resolución de su solicitud de asilo. Aquí tendrán protección del Gobierno mexicano, una que también tendrá que pagar.
Sin embargo, no vamos a olvidar la intimidación, las amenazas
El Presidente Donald Trump anunció la suspensión indefinida de los aranceles a los productos mexicanos que entrarían en vigor el 10 de junio tras alcanzar un acuerdo con México para “reducir considerablemente o eliminar” el flujo migratorio.
El acuerdo se alcanzó luego de tres días, y también incluye la compra de “grandes cantidades de productos agrícolas” a Estados Unidos, como lo aseguró Trump la mañana del sábado. Mientras, el Presidente López Obrador, dijo que “fue un buen acuerdo, lo más importante es que no se aplican los aranceles el lunes y reconoce que deben atenderse las causas que originan la migración”.
Es un asunto altamente sensible y complicado
Para muchos, se mostró sumisión, al haber aceptado llanamente las condiciones del vecino país, para detener el flujo migratorio a cambio de no imponer aranceles a los productos mexicanos.
El gobierno federal debe dar una explicación detallada a los mexicanos sobre el trasfondo de los compromisos aceptados ante Estados Unidos, como el convertir a México en un «tercer país seguro» y el uso de la Guardia Nacional para frenar la migración procedente de Centroamérica.
Ahora, “haiga sido como haiga sido”, no va a haber aranceles, pero México, termina convertido en el muro que Trump buscaba y aún así, celebramos que no veremos “la economía mancillada”… por ahora.
Aletia Molina
Periodista, egresada de la UNAM.
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