En la primera quincena de septiembre de 2019, los precios al consumidor aumentaron sólo un 0.17 por ciento, es decir, por debajo de lo esperado, lo cual indica que la inflación se ubicó en 2.99 por ciento, su menor nivel en tres años.
¿Qué ocurre con la inflación?
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó que la inflación quincenal se debe a las alzas en el rubro educativo, automóviles y gasolina de bajo octanaje. Estos aumentos se contrarrestaron parcialmente por la baja en servicios, algunas frutas, verduras, paquetes de internet, telefonía y televisión de paga.
De esta manera, la inflación en la primera mitad de este mes, de 0.17 por ciento, se encuentra 0.24 por ciento debajo de lo esperado, y a tasa anual retrocedió de 3.04 por ciento en la segunda quincena de agosto a 2.99 por ciento, la más baja a tasa anual en tres años.
Así, la inflación en su comparación a tasa anual logró mantener nueve quincenas consecutivas dentro del objetivo para todo el año, de 3.0 por ciento, más/menos un punto porcentual. Comparó que en la primera quincena de septiembre de 2018 los resultados fueron de 0.22 por ciento quincenal y de 4.88 por ciento anual.
La canasta básica
Los productos que reportaron precios al alza en la primera mitad de este mes fueron: educación primaria, automóviles, gasolina de bajo octanaje, jitomate, loncherías, fondas, torterías y taquerías, preescolar, vivienda propia, gas doméstico LP, secundaria y universidad.
Por otra parte, los productos con precios a la baja fueron: servicios profesionales, cebolla, paquetes de Internet, telefonía y televisión de paga, aguacate, plátano, servicios turísticos en paquete, papa y otros tubérculos, manzana, electricidad y carne de cerdo.
El índice de precios de la canasta básica registró una variación quincenal de 0.20 por ciento, así como una tasa anual de 1.91 por ciento, mientras que en la misma quincena de 2018 las cifras fueron de 0.46 y de 7.84 por ciento, respectivamente.
De esta forma, las entidades con variaciones por debajo de la nacional en la primera quincena de septiembre de este año fueron: Tabasco, Jalisco, Baja California Sur, Guerrero y Baja California.
Caso contrario, las entidades con variación de precios por arriba de la inflación nacional en la primera mitad de este mes fueron: Coahuila, Hidalgo, Puebla, Nayarit y Estado de México.
Inflación a la baja no se traduce en salud macroeconómica
Si bien la meta de mantener una inflación a la baja se está cumpliendo, no se debe asumir que el riesgo económico en México ha desaparecido. De hecho, puede interpretarse como lo contrario, pues es un hecho de que el crecimiento está estancado en cero.
Incluso la revalorización del peso contra el dólar mantiene en vilo a los inversores, pues al no presentarse un aumento paulatino del precio de la divisa norteamericana, manda señales de que puede seguir bajando de precio, pero de manera abrupta se calcula una recotización que lo enviaría a nivel de 25 pesos por unidad.
Otra circunstancia que no se ha calculado, es que muchas personas sin empleo siguen gastando en despensa y servicios de vivienda, para continuar su vida normal, pero a partir del uso de créditos. Esta explicación puede encender los focos rojos, pues la falta de inversión tanto de transnacionales como del gobierno, indica que no hay nuevos trabajos, por tanto esos créditos terminarán afectando a las personas en paro.
Hay otro factor de riesgo que aún no se ha contemplado. A pesar de que el precio del petroleo se revalorizó por el incidente en Arabia Saudita, se tiene contemplado que las calificadoras internacionales vuelvan a degradar la evaluación crediticia de PEMEX, debido a la falta de claridad con respecto al intento de saneamiento de la paraestatal, así como la opacidad que rodea a los proyectos de infraestructuras como Dos Bocas.
La conclusión a esta baja de la inflación, es que se debe ver como una ventana de oportunidad para deshacerse y liquidar deudas, antes de que sea demasiado tarde. Las posibilidades de que la economía continúe en picada, y la inflación se dispare en un efecto «rebote» son latentes en cualquier escenario.
Edición @dlpoder