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Carlos Ramos Padilla habla sobre la UNAM

Golpe a la UNAM

 

Ya se presentó, a último minuto, el proyecto de presupuesto a la Nación. Un presupuesto mágico que habrá de cumplir las más ambiciosas intenciones de generar producción y competitividad. Todo es quitar, restar, lo que llaman austeridad. Áreas que verán mermadas sus actividades por el corte a sus ingresos, ahí está la Secretaría de Gobernación con -9%, agricultura -28%, comunicaciones -24%, medio ambiente -32%, PGR – 9.1%…

En cambio suben la defensa nacional un +11:3%, trabajo +932%, energía +961%, turismo +116%… Se nota un fuerte desequilibrio y sorprende que el Ejército Mexicano sea apoyado por una izquierda que por genética lo ha deplorado, devaluado, acusado y menospreciado; y a la Secretaria de Marina, que por cierto, ha dado los resultados más evidentes en la lucha contra el crimen le reducen 9%.

Llama la atención que a la salud de los mexicanos le quiten un 3.2 y a la UNAM le arrebaten más de un 6%. Simplemente no corresponde a lo que exige y necesita el país, gente preparada, instruida, educada. La UNAM es la institución de educación superior más reconocida y la más importante en América Latina, hasta el día de hoy. 350 mil alumnos ahí se preparan para dar a México una mejor posición en el mundo. Ahí se genera la docencia, la investigación más importante y de vanguardia y la difusión de la cultura, a todo aquel que, por diversas circunstancias no ha podido llegar a una Casa de Estudios con tanta dignidad e historia.

Los mejores cuadros, los hombre preclaros, los doctos, los sabios están ahí, en sus pasillos, en sus auditorios. Forman todos, formamos, un proyecto educativo. Ir a la UNAM no es sólo aprender que dejan sus mejores conocimientos en los pizarrones, es mucho más. El fondo de los océanos, el medio ambiente, la investigación espacial, los estudios arqueológicos, el llegar a planetas distantes, el construir códigos de integración humana, el generar ánimo para la cultura, es entre otra de las obligaciones y tareas de la UNAM.

De ahí se han desprendido las mejores ideas, los más brillantes premios nacionales, los ganadores del Nobel. Estudiemos la biografía se sus líderes contemporáneos, Ignacio Chávez, Javier Barros Sierra, Jorge Carpizo, Jose Sarukhàn, Francisco Barnés, Juan Ramón de la Fuente, Jose Narró, Enrique Graue. La firme cimentación de José Vasconcelos. Ahí  está la súper computadora, los estudios más profundos de la genética humana, la Biblioteca Nacional, el estadio más bello del mundo, el pertenecer con orgullo como Patrimonio Mundial en materia de cultura.

Y aquí, aquí, hay miopía, hay falta de valor para defender lo que nos corresponde, a las nuevas generaciones. Parece que nos quieren orillar a convertirnos en un país de pobres e incultos y por ello muchas generaciones y millones de mexicanos no han ofrendado su esfuerzo. La decisión ahora está en el cuerpo de legisladores, pero por lo hasta hoy visto, pues no podemos esperar mucho. Ahí están incrustados grupúsculos que mejor defienden a los anarcos y desestabilizadores, antes que a los jóvenes de excelencia. Nada más veamos a sujetos como Taibó II para entender el destino más próximo.


Carlos Ramos Padilla

@cramospadilla

Periodista y conductor en TV Mexiquense y TVC Meganoticias

Presidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión.



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