El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, previo a su informe de Gobierno habló de la felicidad del pueblo y afirmó que no existe el mal humor social.
«Se dan estos casos (las manifestaciones), pero en general, lo voy a decir, hasta se los adelanto, en mi informe. El pueblo está feliz, feliz, feliz, hay un ambiente de felicidad, el pueblo está muy contento, mucho muy contento, alegres. Entonces, no hay mal humor social», aseguró.
Días más tarde, al cumplir 10 meses al frente del Gobierno federal, el presidente aseguraba que su administración va bien, aunque “no ha sido fácil”…
En un país, que no es México, pero uno que dice el presidente López Obrador que él gobierna, todo es muy feliz y todo está bien.
Para muestra cuando la mañana del 3 de octubre tuvo a bien reconocer la labor de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, durante la marcha del 2 de octubre. Explicó que hubo una buena coordinación y aunque se dieron actos violentos, no fueron como en otras ocasiones.
Agradeció a los ciudadanos por su buen comportamiento, porque ayudaron mucho para evitar violencia… Seguramente que, o no recibe información completa o es el ignorante más grande de la historia.
El saldo final de la marcha en conmemoración del 51 aniversario de la Masacre de Tlatelolco fue de 14 lesionados y tres detenidos que habían tirado petardos a la policía, quienes minutos después fueron liberados ante la mediación de diversas organizaciones de la sociedad civil.
De las 14 personas lesionadas, la mayoría fueron elementos de la policía con heridas leves y tres que ameritaron traslado al hospital.
Por su parte, la jefa de Gobierno, en un audio enviado a través de WhatsApp, agradeció a los funcionarios de su administración por participar en el operativo “Cinturón de Paz” del miércoles.
Es muy probable que no haya visto como fueron correteados, como fueron rociados con pintura en aerosol, como fue expuesta su integridad en un grado muy peligroso.
Los “Cinturones de Paz” estuvieron conformados por 12 mil trabajadores del gobierno capitalino que no respondieron a agresiones de un grupo de manifestantes violentos, sin embargo, sufrieron acoso de un grupo de reventadores que llegan a la psicosis, hay imágenes que muestran a una mujer con un aerosol y un encendedor intentando prender fuego a una periodista… ¿Eso es “estar bien”? Asumo que lo que el presidente quiso decidir, es que pudo ser muchísimo peor y que, sin embargo y por fortuna, no hubo “tanto” qué lamentar.
La inacción, con respecto a los manifestantes, la “terrible amenaza” de acusar a los vándalos con sus madres y abuelos, no funcionaron, se necesita un presidente que tome las medidas necesarias para contener estos actos que marcan la economía, la imagen internacional, a las instituciones y a la sociedad.
No sobre decir que la ciudadanía, todos, pagamos la friolera de 960 mil pesos en 20 mil playeras (que tal vez hubieran servido mejor si hubiera estado rotuladas con unos poderosos «Fuchi, guácala»), para los funcionarios públicos que participaron en el Cinturón de Seguridad, aquí no aplicó la austeridad republicana… Donde sí: esta semana debía comenzar la campaña nacional de vacunación contra la influenza y no ha habido información sobre el tema. Se desconocen las razones por la que no se ha informado a la población dónde vacunarse y quiénes deben hacerlo. Esperemos que no hayan olvidado comprar las vacunas contra la influenza.
López Obrador no ve la 4T como una figura retórica, sino como un concepto. Construir sobre ruinas… Pero no se preocupen, en Amlolandia todos son felices y todo va “requetebien”.