Primera prueba de fuego en materia internacional
Desde el sur avanza a paso lento una segunda caravana migrante que busca llegar a Estados Unidos.»
Los centroamericanos encontrarán en México una nueva administración federal que no ha definido aún cuál será su postura frente a Donald Trump y el rechazo abierto que el mandatario norteamericano ha expresado sobre el tránsito libre de personas hacia el norte.
Ésta será una prueba de fuego para el presidente López Obrador y su canciller maravilla Marcelo Ebrard. Resulta inevitable que la administración obradorista tenga que pronunciarse sobre la construcción del muro en la frontera y las múltiples declaraciones racistas y xenófobas que surgen, de manera habitual, desde Washington hacia los que consideran bad hombres.
Recordemos que los costos de la crisis migrante acontecida a finales del año pasado en México fueron para Enrique Peña Nieto y su mermado gobierno. Fue la última vez que el mexiquense puso la mejilla frente al mandatario estadounidense y los países de la región, adornando así el fin de un sexenio en el que su nivel de aprobación cerro con una histórica caída.
Cambios en el tablero político en 2019
De octubre del 2018 a la fecha, el escenario geopolítico vaya que ha cambiado. Será el fin de un claro round de sombra entre Donald Trump y Andrés Manuel, pues tendrán que subirse al ring de una buena vez. Aderezando el escenario con la ausencia de México en la última declaración del Grupo de Lima, los claroscuros de una posible alianza del gobierno mexicano con Venezuela hacen que los dados sigan en el aire.
Han sido meses de aprendizaje en campo para el gobierno que encabeza el tabasqueño. Los problemas generados en ciudades fronterizas como Tijuana, por conflictos entre la población local y los migrantes centroamericanos, han encendido los focos rojos sobre la pertinencia de contar, de manera urgente, con un plan integral para atender un fenómeno que dista de acabarse pronto.
Vendrán días de definición para México en torno a su papel frente a Estados Unidos. Temas como el combate al robo de combustibles, la construcción de nuevas refinerías y la inminente disminución de las importaciones de combustibles ligeros desde el vecino del norte, son variables que podrían incidir en la relación binacional.
Es indudable la importancia que debe darse a la caravana que en estos días partió de San Pedro Sula, Honduras, y que en poco más de una semana pasará por nuestro país. Es la segunda oleada de muchas más que vendrán, pero una aduana importante que si no se maneja de forma adecuada puede quemar a más de uno.
Entre telones
A lo largo y ancho del país, permea la voz ciudadana que insiste en la necesidad de que el combate al robo de combustible arroje responsables con nombre y apellido. En este sencillo punto está sustentada la prueba de que las cosas en serio van a cambiar.
Pasan los días y seguimos en espera…»
Miguel Ángel Sosa
Periodista y asesor en comunicación política.
Twitter: @Mik3_Sosa
